San Sebastián es una ciudad preciosa, sí, pero su gastronomía la hace un lugar único. Es una ciudad a la que siempre quieres volver; para volver a degustar ese chuletón que tanto te gustó, para comprarle al señor mayor el pacharán o conocer más bares de pintxos.
Las calles más conocidas para degustar estos pequeños bocados están en el casco antiguo, digamos alrededor de Fermín Calbeton.
Pintxo Champiñon – Tamboril
1. Empezamos la ruta haciendo hambre con un pintxo de champiñón, la especialidad según dicen del Bar el Tamboril C/ de Pescadería,2.
2. Ya hemos abierto el apetito… Nuestra ruta sigue por el casco antiguo y qué mejor que continuar con un chuletón! En el Bar Nestor (C/ de Pescadería 11) se dice que son su especialidad acompañados con una rica y sana ensalada de tomate. Probad suerte a ver si queda tortilla, dicen que es buenísima, yo nunca he llegado a tiempo, se acaba en un santiamén. Advierten que lo mejor es ir a las 19h y reservarla…
Pintxo de langostino – Goiz Argi
3. Seguimos para hacer «pit stop» para el pintxo imperdible de langostino en Goiz Argi, C/ Fermin Calbeton, 4.
4. ¿Aún tenemos espacio para algo más? Porque en el Borda Berri (Fermin Calbeton 12) sirven unos pintxos-platillos riquísimos, no os podéis perder los puntalete de Idiazábal. No hace falta que recuerde que cada pintxo hay que acompañarlo de vino, cerveza o txacolí, el famoso vino blanco espumoso típico de la zona.
5. Un poco alejado de estas calles pero perfecto para sentarse en su terraza y degustar en el Bar Valles, sus ricos bocadillos (no os podéis perder el de jamón y queso) C/ de los Reyes Católicos, 10.
Puntalete de Idiazabal – Borda Berri
Para llevarse el mejor souvenir de San Sebastián lo mejor es comprar un buen chuletón en C/Pescadería envasado al vacío, y comprar queso Idiazabal y pacharán en Eizeiza, en la C/Prim.
En el mercado podréis encontrar algunos productos también, yo compré en una parada de una mujer justo fuera del mercado un membrillo buenísimo. Tiene además huevos, quesos,…
En mi última visita a la ciudad de Donosti descubrí una pensión con habitaciones totalmente nuevas y una relación calidad precio alta. El único inconveniente es que está cerca de las vías del tren y eso puede molestar un poco según la situación de la habitación pero sigue siendo una buena opción en el centro. Además, el personal es muy amable. Se llama Pensión Aida y no dudéis en llamar para reservar y preguntar disponibilidad. Calle Iztueta, 9.
