Viajar en coche por Sicilia
El coche es la mejor manera de recorrer una isla del tamaño de Sicilia, la libertad que ofrece para poder acercarse a los mejores rincones y no depender de los horarios del tren o el autobús (Italianos, no lo olvidemos). Si es la primera vez que viajamos por Italia en coche hay que tener en cuenta que los italianos conducen bastante a lo loco, no son conocidos por ser los más prudentes y respetuosos al volante.
Las carreteras están mejor de lo que me imaginaba pero generalmente son de uno o dos carriles. No pagamos ni un solo peaje en toda la isla aunque en alguna autopista principal (siempre de máximo dos carriles) parecía que había antiguas taquillas (ya en desuso) o nuevas (para activarlo próximamente) para pagar.
El precio de la gasolina es siempre más alto que en España y, en general, encontramos gasolineras de forma muy frecuente sin problema.
Itinerario de 10 días por Sicilia
Ruta por el noroeste, de Palermo a Catania
Sicilia es la isla más grande del Mediterráneo por lo que deberemos de priorizar algunas zonas e ir dejando cosas para una segunda visita. Porque eso sí, querremos volver sin duda alguna.
Los principales aeropuertos de la isla son el de Palermo y el de Catania. En Trapani hay un tercer aeropuerto operado básicamente por Ryanair.
La ruta que nosotros hicimos empezaba en Palermo, la mejor manera para empezar con un aperitivo fuerte: dinámica, caótica, algo descuidada. Vamos, de las ciudades que me encantan. Un par de días son buenos para ver bien el centro y alguna cosa más. Puedes ver qué hacer en Palermo aquí y también dónde comer.
Desde ahí teníamos la opción de irnos hacia el este, hacia Cefalú, que nos habían recomendado mucho o bien hacia San Vito Lo Capo, donde habíamos leído que había una reserva natural muy bonita. Decidimos hacer ruta de norte-oeste-sur.
De San Vito lo Capo hasta Trapani
De ahí nos dirigimos a Trapani, donde estábamos una noche para coger al día siguiente un ferry a la isla de Favignana. Una vez más, el tiempo no nos fue a favor y el mar estaba demasiado ajetreado para que salieran los barcos. A pesar de ser septiembre encontramos días de bastante viento y fresquito (y algún que otro chubasco). Alargamos una noche más en Trapani para ver si teníamos suerte al día siguiente pero nada, así que empezamos a recorrer la costa sur-oeste. Desde Selinunte hasta Agrigento, en un par de noches más. Ahí encontramos mejor tiempo. Visitamos los templos de Selinunte y los de Agrigento, estos últimos por la tarde a la puesta de sol, que hacía menos calor y había menos gente, precioso. Entre las dos visitas visitamos algunas playas, a destacar la famosa Scala Dei Turchi, no tanto para un baño sino para ver las famosas rocas blancas de la zona.
De Agrigento a la Villa Romana del Casale, hasta los pueblos del sur y Catania
De Agrigento nos adentramos hacia un poco el centro para visitar la impresionante Vila Romana del Casale, un lugar que nos dejó realmente impresionados por su nivel de conservación. De ahí, llegamos hasta Caltagirone para luego hacer la ruta del sur, Ragusa, Módica, Noto. Nos habían hablado de un pequeño pueblo (básicamente un puerto) muy pintoresco que se llama Marzamemi. Nos alojamos en un apartamento en la Reserva Natural Orientata al Oasis dei Vendicari y nos gustó tanto que frenamos unos días ahí.
La ruta finaliza con la vista de la famosa y bella Siracusa y una breve parada en Catania. No hace falta quedarse mucho en ésta porque no tiene nada muy especial, sinceramente, con 24h tenemos más que suficiente. Si vamos justos de tiempo lo mejor es pasar una mañana y coger el avión esa misma tarde-noche.